Cuando cesa la lluvia el cielo es mas azul
y el contraste especial
que hace frente a las hojas del mango
me trae tranquilidad,
dan ganas de salir afuera y sentir la brisa
que quedó rezagada,
esperando para acariciar tiernamente
a quien la toque,
y puedo sentir el olor a hierba mojada...
y esa sensación a limpio, a fresco, a nuevo;
casi logro sentir que florecen los arboles
y el trino incesante y melodioso de pajaros,
me hace olvidar que detrás de los muros,
afuera de mi patio,
la ciudad circula pesada e indiferente
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