Puedo descansar!

Trabajo en una Clínica, un lugar donde vienen muchas personas enfermas o que creen estarlo, en busca de una cura, y puedo observar como, a pesar de la necesidad de alivio, cada cual adquiere una posición; algunos llegan exigiendo ser atendidos de inmediato, sin importar si hay turnos primero o bien, hay quienes necesitan ayuda urgente, otros siempre están pensando en lo que es justo, el primero entra primero y asi cada cual en su turno y las excepciones para los casos de gravedad, ¡da gusto verlos!; otros por el contrario están allí y desean ser atendidos pronto, pero no se atreven a pedir que los atiendan y muchas veces ven pasar antes a quien llegó después, mientras que ellos siguen esperando a menos que alguien distinto diga: - que pase aquel señor, el llegó primero.-

A veces somos como esas personas, esperamos y esperamos, para ver si  algo ocurre, si alguien avisa que estamos allí, esperando.  Porque tenemos miedo de ser rechazados, porque ya hemos sido golpeados tantas veces que nuestra autoestima quedó por el suelo, y aunque no nos demos cuenta, estamos cediendo terreno al miedo y a la soledad. 

Se puede vivir una vida solitaria, aún en medio de una multitud, porque tienes amigos, pero no llevas una vida abierta, y te averguenzan tus experiencias, y a veces hasta te averguenzas de ti mismo (a),  entonces te conviertes en una persona "interior", llena de los mas altos de ideales, según tu parecer; pero que no logra cumplirlos, y se estanca.  Hay muchas cosas en tu vida que te hacen llorar, pero a solas, porque frente a los demás; eres el mas feliz.

Solo hay una manera de alcanzar la felicidad, de sanar tu interior, de sanar tu autoestima, de recibir amor incondicional, el que buscabas: Jesucristo.  El te está llamando hoy!